Luis Alberto, el arte de ser decisivo en la Lazio
El número 10 de la parte ‘biancoceleste’ de Roma tiene dueño desde hace tres años y lo lleva un gaditano al que apodan ‘el mago’ por los detalles técnicos que suele dejar en el campo. Basta ver el golazo que realizó este pasado sábado ante el Bologna: carrera en campo contrario avanzando metros, caño a Svamberg y después un misil para fusilar a Skorupski. Una acción que vale una victoria para ayudar al conjunto de Simone Inzaghi que está sufriendo en el inicio del nuevo campeonato de Serie A. No hay duda, es el hombre con más clase de esta Lazio.
Lo más sorprendente para muchos es que después de este tipo de acciones el ‘trequartista’ español apenas lo celebra. Ningún gesto particular o aspavientos exagerados, una media sonrisa como si fuera algo normal, él es así. Normalmente se destaca por asistir a sus compañeros, bien lo puede decir Ciro Immobile que fue ‘Bota de Oro’ gracias a sus pases de gol (el año pasado 15 en total) pero esa vez quiso decidir con jugada personal, y mereció la pena. El gol es para verlo en bucle.
Esta jugada podría servir para despertar el olfato goleador de Luis que últimamente se había apagado. Tras el confinamiento solo había anotado dos goles: el 27 de junio ante la Fiorentina y el 11 de julio ante el Sassuolo. Esa Lazio era reconocible porque se había desinflado tras el ‘lockdown’, un equipo que antes del parón luchaba por el título pero que acabó en cuarto lugar. Ese conjunto daba la impresión de estar desgastado y en el nuevo año seguía con esas sensaciones negativas, hasta el pasado martes. La victoria contundente contra el Borussia Dortmund parece que puede ser un punto de inflexión para que los ‘biancocelesti’ vuelvan a superar rivales con buen fútbol. El gol anotado de LA10 y la competitividad mostrada contra el Bologna este sábado hacen pensar que sí.