El Inter busca recuperar al mejor Hakimi Achraf
El fichaje más ilusionante de la campaña 20/21 para los ‘nerazzurri’ no fue un delantero pero aún así despertó la admiración de los aficionados desde el principio. Hakimi, como se le llama en Italia, llegaba como un velocidad y su técnica. Además, atrás suele cumplir gracias a la ayuda de los tres centrales que le cubren las espaldas y su capacidad de recuperación. Sin embargo, sus últimos nueve días no han sido nada fáciles en Milán. Su error ante su ex-equipo, el Real Madrid, regalando un balón clave para el 0-1 a Benzema ha pesado y su juventud (22 años) hace que todavía tenga que crecer desde el punto de vista de la madurez.
Seguramente esa pequeña crisis la ha visto Conte y después de los goles fallados contra el Parma y de su mala prestación en Valdebebas decidió dejarle en el banquillo en Bergamo. Antonio definiría esto como un ‘proceso de crecimiento’ y es que Italia no es Alemania desde el punto de vista táctico. Su rol en el sistema del preparador de Salento es crucial y para ello deve mejorar su colocación en el campo.
La diferencia respecto al Dortmund es que allí tenía mucha más libertad que en este Inter, en su nueva etapa la responsabilidad defensiva es más alta y es que en muchas ocasiones toca apretar los dientes y toca correr más hacía atrás que hacía delante. Aunque no sólo eso, a la hora de atacar seguramente se necesita un Achraf más incisivo. Sus subidas por el carril derecho deben sorprender a sus rivales y probablemente en algunas ocasiones debe esperar a incorporarse arriba para no saturar los espacios.
Sin duda no es sencillo llegar a un conjunto con una cierta complejidad de juego como el ‘nerazurro’ y acertar todo a la primera. Y más con la cantidad de encuentros disputados en tan pocos días. De hecho, en Madrid dio la sensación de que el marroquí sufrió algo de cansancio físico en la segunda parte.
Estamos en un periodo particular pero su capacidad para gestionar las fuerzas a lo largo de los 90 minutos puede mejorar. Son detalles que se han visto en las últimas semanas en las que se ha diluido el gran impacto que dejó al inicio de temporada y que hacía esperar que su llegada iba a ser diferencial para despertar al equipo cuando necesitase puntos. Sin duda, estamos ante un jugador de alto nivel pero que aún debe crecer, y eso, a la sombra de Conte es casi un seguro.