Inaki Avial nos recomienda un pronóstico para la Copa del Rey.
Toda final con un título en juego hace que aumente la tensión, pero en este caso, el choque de estilos ha hecho que se multiplique. A Pepe Bordalás suele acompañarle la vitola de entrenador de equipos que ensucian los partidos importantes, especialmente en eliminatorias; basando su plan en una presión agresiva sobre el poseedor rival, mucha fricción con marcajes mayoritariamente individuales y ralentización mediante faltas tácticas que provoquen numerosos parones. Así desquició y desnaturalizó al Ajax de ten Hag en Europa League y, de este mismo modo, hizo lo propio con el Athletic Club este curso en las semifinales de Copa del Rey. Dos ejemplos paradigmáticos de cómo lleva los partidos al barro. Las estadísticas también lo respaldan en el partido a partido: mientras el Real Betis 21/22 tiene una media de 2´6 tarjetas amarillas por partido, el Valencia CF cuenta con 3´5. Y mientras los primeros realizan 12´8 faltas por encuentro, los segundos están en una media de 16´8.
Los de Pellegrini llegan ya advertidos y ambos estrategas han tenido un cruce de declaraciones; donde aluden a los estilos, aumentando la temperatura en la previa de este trascendental enfrentamiento. Dadas las características de un Real Betis con mucha calidad en 3/4 de campo, de la mano de los Canales, Fekir & co., se espera un choque donde el Valencia vuelva a jugar un partido de muchas interrupciones, que corten el ritmo en los momentos de asedio. Y, de paso, que aumenten también las pulsaciones de un rival que viene sufriendo en la defensa del área, mientras que el cuadro “ché” es un plantel más que capacitado para hacer daño en acciones a balón parado, aprovechando el gran pie de Carlos Soler y rematadores de la talla de Gabriel Paulista, Omar Alderete, Mouctar Diakhaby o Maxi Gómez.