José Gavilán nos recomienda un pronóstico para el Mundial.
Este es un gran choque de la última jornada de la fase de grupos de la Copa del Mundo entre los rivales británicos, Gales e Inglaterra, quienes podrían tanto asegurar su presencia en la fase eliminatoria, como también ser eliminados de la competición. Las esperanzas de Gales de alcanzar los octavos de final recibieron un duro golpe el viernes, cuando después de que su portero titular, Wayne Hennessey fuera expulsado, encajó dos goles en el tiempo de descuento de la segunda mitad para caer 2-0 ante Irán, lo que significa que ahora necesita obtener los tres puntos en este choque y que Irán y Estados Unidos empaten en el otro partido del grupo. En el improbable caso de que derrote a los “Tres Leones” por una diferencia de cuatro goles, Gales clasificaría sin importar lo que pase en el otro encuentro del Grupo B.
Sin embargo, ese escenario parece un poco imposible, dado que los “Dragones” no han ganado en sus últimos siete partidos en todas las competiciones, lo cual es su racha más larga sin victorias desde mayo de 2003. También parece haber pocas posibilidades de que esa racha finalice contra Inglaterra, considerando que Gales ha perdido en sus seis choques previos entre sí por un marcador global de 11-1.
Inglaterra desperdició la oportunidad de sellar su pase a los octavos de final contra Estados Unidos, y los seguidores de los “Tres Leones” no dudaron en expresar su disgusto luego del empate 0-0 el viernes en el Al Bayt Stadium. Un desafiante Gareth Southgate prometió que el “ruido externo” no impactará a su equipo, el cual aún está en una buena posición y puede asegurar su nombre en la fase eliminatoria con solo un empate en este encuentro.
Aún así, la presión estará sobre el conjunto de Southgate, que buscará cerrar la fase de grupos con un resultado que le ayude a ganar el Grupo B, especialmente porque se enfrentará a un viejo enemigo como Gales. No obstante, las victorias han sido difíciles de conseguir para Inglaterra últimamente, con su triunfo 6-2 ante Irán siendo su único éxito en ocho partidos, eso igualó su más baja cantidad de victorias durante un espacio de ocho compromisos desde una racha que duró de octubre de 2001 a junio de 2002.
El pick recomendado es el de victoria inglesa por más de un gol.