Giacomo Baraggioli nos recomienda un pronóstico para La Ligue 1.
La de Niza no ha sido ciertamente la salida que se podía pronosticar, la derrota contra el Montpellier, gravísima sobre todo en el plano del juego ha quitado alguna certeza a la formación de Vieira, pero sobre todo representa el último partido en el que la formación de la Costa Azul ha logrado marcar un gol.
Si el 0-3 contra el Paris Saint Germain fue predecible, el 0-0 en casa del Burdeos fue sin duda mala suerte. A pesar de no brillar particularmente, Niza tuvo que conformarse con un empate después de haber golpeado cuatro veces al poste de la portería de Costil. Una señal positiva desde un cierto punto de vista, ya el regreso en pareja de Dolberg y Gouiri da un espesor ofensivo diferente a la Niza, pero sigue siendo insuficiente para apuntar a un campeonato ambicioso. El técnico francés está haciendo girar a sus hombres a la derecha para el reemplazo de Atal, lesionado, pero todavía no parece haber encontrado la mejor solución.
Esta noche en la Allianz Riviera llega un Nantes de dos caras: equipo sólido y peligroso cuando juega en su propio estadio, pero tímido como lejos de la Beaujoire. Un solo punto, el aburrido 0-0 de Burdeos y dos derrotas no pesadas contra equipos de valor como Mónaco y Lille, pero la impresión de que al equipo de Gourcuff siempre le falta algo. Si en la fase defensiva no parece haber grandes problemas, adelante sigue faltando alguien capaz de hacer goles con regularidad, a pesar de la calidad de los jugadores de apoyo como Louza y Simon. Un problema que en Nantes se enfrentará también en Niza, donde el equipo de Vieira es favorecido por la victoria final.