Kfpicks nos recomienda un pronóstico de ciclismo para Milán - Sanremo.
Nos vamos a este pick de ciclismo, concretamente a la Milán-San Remo, la conocida como La Classicissima, una carrera considerada como uno de los 5 monumentos del ciclismo y que habitualmente se celebra el tercer sábado de marzo pero que este año debido al Covid, la edición número 111, se ha desplazado a pleno mes de Agosto.
Es una carrera de casi 300km, considerara por muchos como la clásica más fácil de acabar pero la más difícil de ganar.
Este año debido al covid, aparte de la fecha, se ha modificado el recorrido ya que se corre en Lombardía una de las regiones más afectadas por la dichosa pandemia y teniendo en cuenta la grandísima afluencia de público de esta carrera varios ayuntamientos de la zona han decidido sacar sus localidades del recorrido habitual.
Es por ello que nos encontraremos con una edición algo más light donde se han eliminado los pasos de Mele, Cervo y Berta.
Esto provocara que los equipos (este año son 6 corredores por equipo) no tengan que sacrificar tanto gregario en el control de la carrera y lleguen a la zona importante con bastantes miembros todavía. Sí que se mantienen el paso de la Cipressa y el Poggio, dos ascensiones que generalmente seleccionan la carrera.
Este año, aunque decidir si habrá sprint o no suele ser una lotería si que me atrevería a afirmar que veremos una volatta de un grupo medianamente numeroso donde eso sí, los sprinters que no pasan bien las colinas caerán por selección natural en el Poggio.
Hay que destacar que este año el hecho de tener tan comprimida la temporada ha hecho que los ciclistas no puedan optar a dos picos de forma y tengan que seleccionar muy buen su calendario, es así como por ejemplo el ganador del año pasado, Julian Alaphilippe ha dicho que no llegara en un estado óptimo ya que su objetivo es el tour de Francia.
Es aquí donde entra nuestro corredor, Arnaud Demare, un ciclista que llega al nuevo comienzo de temporada en un estado de forma muy bueno como se ha podido comprobar en la Vuelta a Burgos donde firmo dos segundos puestos en las dos etapas al sprint que hubo.
Es un ciclista que ya sabe lo que es ganar esta carrera como hizo en 2016 e incluso subir al pódium como hizo en 2018. No debería tener problemas en superar las ascensiones, es un corredor que habitualmente llega en el grupo cabecero, y en el sprint será uno de los gallos a batir.
En resumen una cuota totalmente loca la que nos ofrecen para un ex ganador que también sabe lo que es subir al pódium y que llega en buena forma a una cita que vuelve a dar comienzo a esta loca temporada.