Sergio González nos recomienda su pronóstico para este combate de peso welter de la UFC.
En el peso medio nos espera uno de los combates preliminares más emocionantes. Sam Patterson ha disputado cuatro combates en la UFC, todos ellos terminados en el primer asalto: tres victorias por sumisión y una derrota por KO a manos de Yanal Ashmouz. El grappling de Patterson es increíblemente bueno y sus técnicas de estrangulamiento son magníficas. Su tiempo medio de combate, inferior a cuatro minutos, demuestra su deseo de dominar a sus oponentes desde el principio y buscar rápido ponerle fin al asunto, pero esto también se debe a que Sam tiene la mandíbula de cristal.
Trey Waters peleó dos veces en la UFC y ganó ambas por decisión de los jueces, y no es que Waters no sea un noqueador, sino que se enfrentó a rivales muy fuertes como Josh Quinlan y Billy Ray Goff. Por cierto, Trey los dejó a ambos boquiabiertos. Antes de llegar a la UFC, perdió en la Contender Series contra Gabriel Bonfim por estrangulamiento con la técnica Von Flue.
No creo que este combate se prolongue mucho, 10 minutos en la jaula con Patterson es mucho tiempo. El británico, como siempre, se lanzará a la lucha para, desde los primeros segundos, proteger su barbilla de los precisos golpes del boxeador Waters y, si acaban en el suelo, Patterson encontrará rápidamente la sumisión. Waters puede evitar la lucha, y entonces Sam correrá un gran peligro de pie
