El Cádiz ya no tiene objetivos en la clasificación y solo busca cerrar dignamente el curso. En su último partido en casa, el equipo de Gaizka Garitano querrá regalar una victoria a su afición. El Huesca, en cambio, aún tiene opciones matemáticas de alcanzar el play-off, aunque sus últimos resultados generan muchas dudas.
El equipo andaluz está completando una temporada discreta, anclado en mitad de tabla. Sin embargo, como local ofrece buenas garantías: solo una derrota en sus últimas 10 actuaciones en casa (cinco victorias y cuatro empates). En ese tramo ha marcado 14 goles y ha recibido solo seis. El gran baluarte del equipo es el portero David Gil, quien ha dejado su portería a cero en un tercio de los partidos (12 de 36). En ataque destacan Javier Ontiveros y Chris Ramos, ambos con 10 goles esta temporada.
El Huesca se descolgó recientemente de la lucha por el play-off, situándose ya a cuatro puntos del sexto clasificado. Además, encadena seis partidos sin ganar fuera de casa. Y eso que los rivales han sido todos de la zona media-baja de la tabla como Tenerife, Zaragoza o Deportivo. En ese tramo, los de Hidalgo encajaron 10 goles y cometieron al menos cuatro errores que acabaron en gol en igual número de partidos.
El Cádiz rara vez pierde en casa y suele marcar como mínimo un gol. Huesca, por su parte, pierde muchos puntos fuera y sufre graves errores en defensa. Lo lógico sería que los locales, como mínimo, no perdieran y consiguieran al menos un tanto ante su público.