El Levante, que ya está de vuelta en la élite del fútbol español, jugará su último partido de la temporada contra el Eibar, que sigue lejos de la lucha por los puestos de play-off. El equipo valenciano no insistirá en abrir el juego: al igual que su rival, le gusta jugar a un ritmo lento.
Con tres victorias en las tres últimas jornadas, el Levante se ha garantizado la permanencia en Segunda, arrebatándole el liderato al Elche. De hecho, un empate el domingo le bastará a los Granotas para proclamarse campeones de la Segunda - en caso de igualar en puntos con el escolta, igual seguirían teniendo ventaja. En casa, los "azulgranas" sólo han recibido 20 goles en 20 partidos - y aquí el Total menos (2,5) se ha dado en dos partidos seguidos.
No es la primera campaña que el Eibar es uno de los participantes menos espectaculares del campeonato. De los 41 partidos de la presente temporada, los vascos acumulan 28 partidos que terminan en Total menos 2,5, lo que los convierte en el equipo que protagoniza los juegos con peor efectividad del campeonato. De visitante, los Armeros llevan cinco partidos seguidos sin perder, y en general han recibido 21 goles en 20 partidos fuera de casa -sólo el Elche tiene una defensa más sólida en la Segunda (19)-. El Eibar no tiene motivos para luchar hoy, pues ya no puede alcanzar a sus rivales del Top-6.
Comparado con el partido de la primera vuelta, en el que Levante y Eibar combatieron para lograr un punto (2-2), el encuentro del domingo no tendrá muchas ocasiones. Las defensas sólidas de ambos equipos impedirán que los ataques generen situaciones de peligro.